lunes, 26 de septiembre de 2011

La rueda lenta que te muele




Esa quemadura, esa luz que cava y revienta silenciosa por dentro. Uñas rasgando desde el fondo, como si alguien estuviese asfixiándose en ti o buscando salir de ti. Quizá el que eras hasta ayer, quizá el que serás mañana. Y es entonces afuera igual la náusea antes de escalar el vacío, aferrarte a la  rueda lenta que te muele segundo por segundo, silenciosa, eficaz, mientras cierras los ojos e inclinas la  espalda, ensordecido, perfectamente aleccionado en el terror.
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2 comentarios:

  1. el secreto es de los misterios, estimado Pedro Arturo, y la llave de la puerta fue lanzada al abismo...

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  2. Esa rueda lenta que nos mueve… hacía la nada, quizás… pero en las lentas vueltas agónicas, si respiramos, parpadeamos, sentimos… esa lenta rueda que nos mantiene en movimiento (existiendo). Gracias! Por compartir Caballero.

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